4 de agosto de 2013

Pasión





¿Soy, las marcas que veo frente a este espejo hoy?.
¿Acaso soy, este cuerpo herido, esta mirada que a veces se apaga y otras veces reluce de pequeñas batallas vencidas?.
¿Soy estas manos, estas cicatrices, soy estos brazos y estas piernas que a veces duelen?.
Soy los amores pasados que duermen conmigo cada noche, soy los amigos que traicioné, soy los enemigos que derroté en el olvido, pero que veces retornan a mi
como un enjambre hambriento de culpas y rencores, de ardides y dolores.
¿Soy todo eso que amé y odié, quise y aun hoy a veces recuerdo?.
Se que soy, soy ese niño soñador que a veces parece que nunca creció, soy ese hombre que no ha dudado en luchar por lo que ama, quiere, siente y espera de este mundo que se cae como una manzana podrida de ilusiones que murieron al nacer.
Soy un guerrero, que a veces cambia de rostro y de armas, pero nunca de bandera, porque mi estandarte a sido el mismo todos estos años, el estandarte de la Pasión.
Pasión por aprender, por viajar, por sentir, por conocer.
Pasión por amar y ser amado, pasión por vencer y aun vencido, pasión por lamerme las heridas y volver a renacer.
Pasión, pues ¿de que valdría la pena ver danzar a la Vida y a la Muerte juntas, si no lo hicieran con la música de la pasión?

Griel

16 de abril de 2013

Carta a mi madre





Escribo esta carta desde hace 26 años.
Desde aquella tarde lluviosa de abril en que el mundo me vio nacer, de tu mano.
La misma mano que guió mis pasos cuando aprendí a caminar,
la que me enseño a escribir y a contar.
La que, aferrada a la mía, me acompaño por las tinieblas de la soledad y la enfermedad.
Esa mano de madre, que cocinó, limpió y me ató la moña para ir a la escuela.
Que me enseñó que en la vida hay que ser honesto y siempre honorable.
Que me mostró que con voluntad y bondad, todo se hace.
A esas manos, a esa madre, van estas palabras,
porque esto jamas será un poema
ya que no existen las palabras que completen mi gratitud
y jamas podrán llenar el espacio que necesita el pedestal que habría que levantarte
Por ser, con orgullo, mi madre.


                                                                                                                                  Daniel
                                                                                                                                 16 de abril del 2013